En consejos anteriores, hemos hablado de cómo podemos ahorrar en la factura del gas y para ello, qué podíamos hacer para moderar el consumo. Pero, añadido a esto, hay que dar algunos consejos sobre cómo podemos mantener bien todo el conjunto.
Hay que tener en cuenta que siguiendo estos consejos se puede ahorrar hasta un 10 % en el consumo energético de la familia; por lo que si no lo llevamos a cabo eso será lo que aumente en nuestra factura.
– Antes de poner en marcha la caldera hay que revisar todas las conexiones: conducto del gas, tomas y salidas de agua y enchufe con la red eléctrica.
– Controlar que la presión sea adecuada: debe ser entre 1,2 y 1,5 como máximo. Para purgar el resultado podemos usar la llave de llenado de la caldera y corregirlo.
– La temperatura que haya en la casa debe ser confortable. Hay que tener la casa a 18 grados cuando no estás y no pasar de los 23 cuando estamos en ella. De esta forma se optimiza en el gasto de la calefacción.
– Comprobar que los radiadores calienten. Para ello hay que purgarlos al menos una vez al año.
¿Qué es purgar un radiador? Se trata de eliminar el aire que se queda en el circuito de la calefacción para que el agua caliente se distribuya y llene los radiadores, evitando que puedan rendir según su potencia.
¿Cómo se puede purgar un radiador? En primer lugar, hay que tener la caldera apagada desde como mínimo dos horas antes de iniciar el proceso.
Debemos utilizar un recipiente para recoger agua y un destornillador.
Lo único que hay que hacer es girar el purgador para abrirlo e volver a cerrarlo cuando cese el silbido de aire del interior y comiencen a caer las gotas de agua.
Con estos consejos se puede comenzar a notar un ahorro en nuestra factura del gas.
