Al menos una vez cada cierto tiempo deberíamos hacer una limpieza de nuestro frigorífico, puesto que la acumulación de diferentes tipos de comida no envasada hace que los “bichitos” que puedan estar en la comida se paseen por todos los compartimentos.
Algunas personas podrían pensar que si no tienen verduras o frutas dentro del frigorífico esto no puede pasar; además de que, si tenemos carne o pescado esperando a ser cocinado, puede suceder que, al ir pasando los días, se adhieran las bacterias por la no limpieza de los compartimentos.
Por otro lado, también debo resaltar que es probable que las encargadas o encargados de limpiar la nevera no lo hagan de la manera correcta. Todo el mundo es capaz de pasar una balleta cuando algo se derrama, pero ¿somos capaces de limpiar a fondo las bobinas o la bandeja de drenaje?
Debemos seguir una serie de pasos para realizar una limpieza exhaustiva, por lo que los resumo en esta lista:
– Primero: apagar y, si se puede, desconectar la nevera para evitar riesgos.
– Segundo: Vaciar el frigorífico y tirar todo lo que no sea necesario. Sí, todo. Hay algunas cosas que conservamos que probablemente lleven bastante tiempo y no tengamos intención de consumir, por lo cual, no tenemos que guardar nada que hayamos comprado hace más de un mes.
– Tercero: Ahora comenzamos con la verdadera limpieza. Hay que limpiar todas las juntas. Ésta es la zona donde se acumula más suciedad y teniendo en cuenta que puede hacer que se pudran las gomas, lo mejor es limpiarlas a fondo con agua y vinagre.
– Cuarto: Saca los cajones y baldas y límpialos con un trapo mojado en agua y jabón.
– Quinto: A continuación, realizamos una mezcla de dos cucharadas de bicarbonato sódico en un litro de agua. Con esa mezcla frotamos todo el interior y, después, con un trapo seco pasamos todo el frigorífico y volvemos a colocar los cajones y las baldas de nuevo.
– Sexto: Utilizando un poco de vinagre con agua limpiamos todo el exterior del frigorífico; ya que en él se han ido depositando restos de grasa de cuando cocinamos.
– Séptimo: Localiza la bandeja de drenaje de tu nevera. En cada frigorífico se encuentra en un sitio distinto; por tanto, debes buscar en el manual que tengas y sacarla. Debes limpiarla utilizando guantes y unas gotas de lejía.
– Octavo: En último lugar, si podemos moverlo, limpiamos la parte trasera de nuestro frigorífico, que es donde están las bobinas que pueden tener cantidades de polvo acumuladas.